Roberto de la Barrera: vaya pa que descargue…

Frank Patiño

Cuando la pachanga reinaba en la rumba del Caribe – en los albores de los Años 60 – el pianista Roberto de la Barrera escribía las primeras páginas del movimiento salsero en Colombia. Su nombre ha sido borrado de la memoria musical gracias a la historia oficial de la música antillana en Colombia, que ubica en las ciudades andinas un enigmático origen. Pero antes de que aparecieran las capitales de la salsa, Roberto de la Barrera dejaría una huella en su generación – los cocacolos – de zapatos capricho en pisos ajedrezados.

En octubre de 1965 grabó su primer álbum ‘Pa los cocacolos’ con Discos Fuentes, empresa en la que laboraba como director musical desde hacía un año. En el prefacio del disco, firmado por Fabio Rincón, se anuncia: “Y el pleno partido de sus experiencias técnicas lo ha sacado RDLB para traducirlo en la integración de su Sonora, elemento casi indispensable en todo baile que se respete… RDLB interviene en este álbum como pianista, pero bien se observa que sus cualidades artísticas recaen en todos los instrumentos de la orquesta”.

‘Pa los cocacolos’ se inicia con el tema-invitación ‘Charanga loca’ y continúa con ‘Vamos a pachanguear’, ‘Mi caleña’, ‘Charanga guajira’ y ‘Vestío prestao’ en el Lado A. En la segunda cara se encuentra ‘La vieja Nico’ y ‘Se formó’ – que introduce una descarga de percusión con el fraseo: “Se formó la pelotera por bailar esta pachanga” y que anuncia el ‘piano mágico’ de Roberto de la Barrera – , sigue con la canción insignia ‘Los cocacolos’:

“El ritmo de esta charanga / es para los cocacolos / y cuando ya se enamoren / la lleven dentro del alma / bailen, bailen, cocacolos / bailen, bailen, la charanga / bailen, bailen, que es así”.

Tres canciones más de este larga duración son: ‘Pobre Casimira’, ‘Gozando la charanga’ y ‘Pachanga espacial’.

En el álbum ‘Se formó la salsa’ – cuando en los acetatos aún se escribía el ritmo de cada canción – se encuentran canciones como ‘Mi son montuno’, con la que planta su bandera en la música antillana, el merengue ‘Juanita Morel’, la guaracha ‘Macondo’ y el bolero ‘Historia fugaz’.

Pero tal vez la mejor canción de Roberto de la Barrera sea ‘Mi sonora’:

“Señoras y señoras y ahora con ustedes la Sonora de Roberto de la Barrera: vaya pa que descargue / el Village Gate / Muévete ya, vente a gozá, que la sonora llegó y a todo el mundo alegró”, magistral ejecución de las trompetas que con la enjundia de los bajos dan paso al piano mágico – ese sí fundacional – que alebresta los cueros.

En 1970 conforma la Orquesta Ecos con Tony Zúñiga, quien fuera una de las voces de los Corraleros de Majagual. El 2 de octubre de 2003 muere Roberto de la Barrera, quien sería con Michi Sarmiento el pionero de la salsa en esta esquina del Sur del Caribe.